¿Qué es un etólogo veterinario? ¿Qué soy?

Muchos de vosotros me habéis preguntado en consulta por mi especialización “¿Qué es un etólogo veterinario? ¿Tú realmente qué haces?” Es una pregunta que escucho muy frecuentemente. Hoy intentaré describiros qué es un etólogo veterinario y qué ocurre en mi consulta.

Cuando una mascota tiene un comportamiento problemático…una conducta que genera malestar a los miembros de su familia, bien porque el comportamiento en casa o en la calle es molesto, intolerante, incontrolable o genera sufrimiento al animal, es decir, el animal se estresa, tiene miedo, ansiedad o está en compromiso su bienestar animal a nivel psicólogico… Entonces necesita un etólogo veterinario.

Perro equilibrado gracias a etología clínica

Los etólogos veterinarios somos veterinarios especializados en medicina veterinaria del comportamiento, etología clínica o zoopsiquiatría (término más utilizado en Latinoamérica). Los tres son términos sinónimos, pero atenderemos al concepto zoopsiquiatría para explicar más fácilmente nuestra intervención en la salud de las mascotas, para apoyarnos en el paralelismo con la salud de las personas.

Zoo/psiquiatría

Zoo= Animal

Psiquiatría = Psique + iatría

Psique= Mente

Iatría= Curación

La psiquiatría tiene por objeto el estudio, prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de los trastornos mentales..[1] Esta definición está recogida del BOE que aprueba el programa formativo de psiquiatría en España.
http://www.boe.es/buscar/doc.php?id=BOE-A-2008-15079

Del mismo modo, en el Reglamento para el  ejercicio profesional en la clínica de pequeños animales (una serie de requisitos no establecidos al azar que las clínicas veterinarias tienen que cumplir para ofrecer unos servicios a vuestras mascotas tan dignos como cualquier centro médico homologado)  aparece que “La clínica veterinaria es aquella especialidad del ejercicio de la veterinaria que se ocupa de las enfermedades y su prevención, del manejo, conducta, nutrición, selección genética, medicina preventiva y curativa, identificación y peritaje de los perros, gatos y de otros animales de compañía”[1]

http://www.vetercaceres.com/wp-content/uploads/2013/10/REGLAMENTO-PARA-EL-EJERCICIO-PROFESIONAL-EN-CL%C3%8DNICA-DE-ANIMALES-DE-COMPA%C3%91%C3%8DA.pdf

El mismo BOE antes referido describe más adelante “La Psiquiatría es una especialidad de la Medicina que sin perjuicio de sus raíces comunes con otras disciplinas sanitarias, se ocupa de los trastornos psiquiátricos, entendidos como lugar de encuentro de lo biológico, lo psicológico y lo socio-cultural; sus intervenciones se basan en la observación clínica y en la investigación científica, incluyendo una amplia gama de técnicas, desde aquéllas de carácter interpersonal como es el caso de las psicoterapias y la rehabilitación, hasta otras actuaciones como el diagnóstico por neuroimagen, la psicofarmacología y otras intervenciones biológicas

Y con esto podríamos terminar la entrada. Jeje Que no!! Que os lo explico detenidamente. Básicamente en eso se basa mi trabajo, pero con animales. En mi consulta recibo pacientes con problemas de comportamiento( agresividad ,miedo, ansiedad por separación, fobias, disfunción cognitiva “el alzheimer canino” con muchas comillas eh, otro día os lo explicaré y otros trastornos), que abordo desde el punto de vista etológico sin olvidar la importancia de las otras ramas de la veterinaria ( o mejor dicho el resto del organismo del individuo, todo depende de dónde tengamos la lupa, si en los libros o en el animal) la medicina interna, la dermatología, la traumatología, la endocrinología y por supuesto, la neurología.

En mi consulta nos podemos encontrar con diagnósticos:

  • Biológicos: Causa o enfermedad orgánica
  • Psicológicos:  Etológicos
  • Socio-culturales (tal y como suena)

Así de cabeza, os puedo mencionar un perro agresivo hacia miembros de la familia por dolor por una enfermedad en la cabeza del fémur, otro agresivo por epilepsia parcial, un perro con miedo por hipotiroidismo, un gato que orinaba fuera de la bandeja por discoespondilitis, una gatita con alopecia en la tripa por cálculos vesicales, etc

También he consultado perros con miedo por mala socialización o experiencias traumáticas, sobre todo aquellos con historial de abandono, problemas de aprendizaje de hábitos higiénicos en cachorros o no tan cachorros (los famosos “Cacota y pis”), fobias y  otros comportamientos puramente etológicos.

Por último, la incidencia de los aspectos socio-culturales de las familias en mis pacientes es mucho más destacada que en cualquier otra especialidad. La idiosincrasia de la región, el concepto del perro o del gato como mascota en la familia,  el concepto de castigo físico como medida educativa, el nivel educativo, los antecedentes personales son algunos aspectos que van a definir el comportamiento del propietario con el animal y por ende el ambiente del mismo, repercutiendo en la conducta de mi paciente.

Para llegar a un diagnóstico puedo necesitar varias herramientas. Todo depende del caso en cuestión pero lo mínimo es una anamnesis etológica (entrevista de diagnóstico), dónde entrevisto a los propietarios sobre el comportamiento del perro, su ambiente, rutina, comunicación con el mismo, tipo de manejo, etc. Normalmente, realizo una exploración física (reviso y exploro a mi paciente de cabo a rabo, nunca mejor dicho, como hacen todos los veterinarios), si el caso lo permite (ya hemos visto que no podemos olvidarnos de ningún aspecto médico que pueda justificar el comportamiento). En algún caso puede ser más conveniente no explorar al animal por su propio bienestar.

Sensor de latidos para etología

Según el caso puedo solicitar videos del comportamiento del animal en casa, otra consulta para la observación en directo, una exploración física por parte de su veterinario habitual o pruebas complementarias como  raspado,  citologías, análisis de sangre y orina, radiografías, ecografía o resonancia magnética.  Para la realización de dichas pruebas se dirige al paciente de nuevo al veterinario remitente para encargarse del estudio diagnóstico.

Respecto al tratamiento ocurre lo mismo, depende del caso. Aquí reside la importancia de trabajar bajo un diagnóstico. Por este motivo y muchos otros no puedo responder a las preguntas “¿Qué le puedo dar?” Si no sabemos qué tiene no sabemos qué debemos dar. Cuando diseño un plan de tratamiento intento abordar todos los frentes que tiene abierto mi paciente, en su orden y a su ritmo, utilizando todas las herramientas conocidas y validadas por la ciencia sin menoscabo de su bienestar ni del de vosotros, sus propietarios, informando de todas las características de cada medida a tomar. Siempre trabajo desde la comprensión y la empatía e intento adaptar los tratamientos a cada circunstancia y tener en cuenta las particularidades de cada hogar, cada familia y cada animal.

En el tratamiento os podéis encontrar que vuestro  perro o gato necesite normas de convivencia para el hogar,  ejercicios para trabajar en casa,  técnicas de enriquecimiento ambiental, sesiones de modificación de conducta periódicas, castración, medicación (psicofármacos, hormonas tiroideas, antiinflamatorios, glucosaminoglicanos para la pared de la vejiga de la orina, por decir algo… todo depende del caso), un tratamiento quirúrgico de otra enfermedad, etc. En mis tratamientos siempre encontraréis técnicas contrastadas y estudiadas científicamente, tanto medidas puramente clínicas como aquellas de carácter estrictamente psicológico.

En resumen, en mi consulta estudio al paciente y sus circunstancias, descarto las posibles causas orgánicas que puedan justificar el problema de conducta, asumo un diagnóstico y diseño un . Tras esto, estamos listos para ponernos manos a la obra!!

 Y todo ello, lo hago con la pasión, la motivación y la fortuna de dedicarme a la profesión que amo, la medicina veterinaria del comportamiento, honrado por el lugar que me concedéis en cada consulta, para mí tan importante como el de un pediatra.

Todo terminará con una sabrosa galletita u otro premio para el cuadrúpedo… que dependiendo de su comportamiento se podrá ganar alguna otra antes.

Espero que estas palabras os hayan servido para comprender qué es un etólogo veterinario y para ayudaros a imaginaros que puede ocurrir en mi consulta.


[1] ORDEN SCO/2616/2008, de 1 de septiembre, por la que se aprueba y publica el programa formativo de la especialidad de Psiquiatría.

[2] REGLAMENTO PARA EL EJERCICIO PROFESIONAL EN CLÍNICA DE ANIMALES DE COMPAÑÍA. Aprobado por la Asamblea General de Presidentes de 11 de julio de 2015

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